sábado, 1 de diciembre de 2007

Percepción social sobre la belleza

El concepto de lo bello surgió como producto del desarrollo social. A través del tiempo, las personas han variado mucho sus concepciones acerca de la belleza. Dicho concepto se manifiesta de manera uniforme en los diversos grupos sociales.

Los estereotipos de belleza masculina y femenina varían considerablemente en los diversos países y épocas. En ocasiones vemos que lo que para nosotros es bello, para otros no lo es, porque en la valoración de lo bello no sólo entra la estética corporal sino un conjunto de elementos visibles y subliminales de la persona: tono de la voz, gracia gestual, inteligencia, cultura, forma de reír, etc.

Sin embargo, vivimos en una época en la cual, la belleza es una cualidad que otorga poder y ventajas, ocupando el lugar preferente en las relaciones humanas; aparece en primer plano, predispone nuestros juicios sobre las personas, y es asociada positivamente cuando recién conocemos a alguien.

Esta situación es respaldada ampliamente por diversos estudios científicos que ponen de relieve la importancia que tiene la belleza como un elemento útil y funcional en nuestras relaciones sociales.

Pero, ¿hasta que punto esta “asociación positiva con la belleza física ha impactado negativamente en la vida de las personas, su autoestima y la forma en que interactúan y se desarrollan en una sociedad que ahora impone características muy específicas para ser considerado como “gente bonita”?

¿Impuesto para los guapos en Argentina?

Un ciudadano argentino, Gonzalo Otálora, cansando de los padecimientos que trae consigo el ser feo, promueve una campaña para cobrar impuestos a las personas consideradas “lindas.”

Dicho escritor de 31 años, desea que las personas poco favorecidas por la naturaleza, o más bien por la genética, sean compensadas económicamente por su fealdad.


Sin embargo esta propuesta también tiene como propósito iniciar un debate acerca del culto a la belleza y la influencia de de los prototipos de belleza en Argentina; país donde las personas suelen ser clasificadas según se asemeje su aspecto físico a la de los modelos, actrices y actores, y en general a cualquier famoso considerado bello o bella.

Otálora, “defensor de los derechos de los feos”, suele protestar frente a la Casa Rosada de Buenos Aires, y espera que su voz se escuchada, pues asegura que en su país los lindos tienen un mejor trato que los poco agraciados, entre los que él mismo se cuenta.

Otálora publicó un libro titulado Feo en el que describe todos los problemas a los que se ha enfrentado por no ser bello, desde el rechazo de las chicas hasta la falta de seguridad para obtener un empleo.

Gonzalo propone que lo recaudado por el impuesto a los bellos sirva para subsidiar a los feos y reparar así su sufrimiento. El argentino quiere que sus compatriotas dejen de moverse en el terreno de la discriminación y a los feos les aconseja que se miren al espejo y se quieran.


*Foto de Gonzalo Otálora.

Cifras y datos intersantes...

Investigación sobre la influencia de la belleza en las mujeres:


Los resultados provienen de un estudio realizado por la firma de belleza Dove en el marco de su investigación internacional sobre el desarrollo de la autoestima y el impacto de los ideales de belleza en la vida de las mujeres y adolescentes. El estudio fue realizado a 3.300 mujeres en once países, y se reafirmó que la satisfacción de una mujer con respecto a su apariencia está estrechamente relacionada con su autoestima.

* 90 % de las mujeres en todo el mundo desean cambiar al menos un aspecto de su apariencia física.
*El 67 % evita ciertas actividades porque se siente mal con su cuerpo.

*Más de la mitad de las mujeres de 15 a 64 años de todo el mundo desearían haber visto en las revistas, adolescentes y mujeres, que se parecieran más a ellas.

*Una de cada 10 mujeres pone en riesgo su salud al evitar ir al médico por estar disconforme con su cuerpo.

*El 14% de las mujeres y el 19% de las adolescentes asumen tener baja autoestima.

*Las chicas empiezan a preocuparse por su aspecto físico a los 14 años. Seis de cada diez mujeres reconocen haber hecho dieta en distintos momentos. Y el 50% considera seriamente someterse a una cirugía estética.

*Seis de cada 10 mujeres de 15 a 64 años de todo el mundo creen que las madres han sido una influencia positiva sobre los sentimientos acerca de sí mismas y de su belleza.

Las normas culturales y sociales de cada país ocupan un lugar fundamental en el deseo de las mujeres de lograr un cambio estético. Los cánones de belleza que hoy la moda aprueba y los medios de comunicación difunden, tienen que ver con seres humanos de tez blanca, altos, delgados, de extremidades firmes y ojos grandes.

Esta contradicción tan espectacular entre la realidad de un país y las imposibles aspiraciones que plantea la publicidad provoca grandes desequilibrios psíquicos y emocionales, sobre todo entre los jóvenes.

Además cabe mencionar que moda y publicidad hacen referencia no sólo a cuestiones estéticas, sino a modelos culturales y de comportamiento. En efecto, en el mundo de la moda para ser considerado “gente bonita”, también se debe seguir un estilo de vida muy específico con conductas, gustos y valores que encuentran su razón de ser en el consumo.


Entonces, ¿qué sucede con aquellas comunidades o culturas, que genéticamente no se adaptan a estos nuevos estereotipos de belleza?


¿Nosotros decidimos sobre nuestra apariencia y reflejamos lo que somos, o es la publicidad la que nos dicta como ser, como vestir, que peinado usar, etc?


¿Nuestra percepción de lo que es bello es un criterio propio e individual, o en realidad aceptamos lo que la moda y publicidad nos impone como lindo, y socialmente aceptable?

Campaña dove

La empresa Dove, dedicada a la elaboración de productos para el cuidado personal, se dio a la tarea de crear una fundación llamada: “fundación para la autoestima”, la cual se ha dado a conocer a través de su ardua campaña en pro de la belleza real alrededor del mundo entero.

A continuación podrás ver algunos de los anuncios que forman parte de dicha campaña, y un excelente cortometraje que expresa claramente lo que Dove intenta cambiar en las mujeres del mundo.
En este primer comercial, se presenta a una pequeña niña y cómo estos estereotipos entran en su mente para dictarle lo que es bello y aceptable, a través de los medios de comunicación:

En este segundo comercial se muestra la tranformación a la que se somete una modelo, desde el peinado y maquillaje, hasta los increíbles retoques con programas especializados:

Este tercer comercial presenta la percepción que tienen de sí mismas pequeñas niñas al rededor del mundo, comparándose con los estereotipos de belleza actuales:

Por último el cortometraje, excelente y real, júzguenlo ustedes: